lunes, 4 de marzo de 2013

Segundo boceto de la clínica

Como os adelantaba hace un par de semanas, aquí tenéis el resultado del segundo boceto de mi clínica. Es evidente que ha cambiado mucho con respecto al primer boceto:




A continuación os indico el inventario de este segundo boceto, de nuevo describiendo las salas de izquierda a derecha y de abajo arriba:

  • Recepción: 1 escritorio/mostrador, 1 silla de escritorio, 6 sillas, 1 armario para el papeleo de recepción.
  • Baño: 1 retrete adaptado, 2 barandillas, 1 lavabo, 1 espejo.
  • Sala de consulta: 1 escritorio, 1 silla de escritorio, 2 sillas, 1 espejo, 1 armario para el botiquín (vendas, agujas de acupuntura, aceite, cremas, alcohol, algodón, etc.), 1 camilla hidráulica, 1 aparato de electroterapia (de los que incluyen las corrientes más utilizadas).
  • Almacén: 1 armario para los repuestos del botiquín, 1 armario para los repuestos del baño y los productos de limpieza, 1 armario para los repuestos de la sala de tratamiento (colchonetas, cubrecamillas, etc.).
  • Sala de tratamiento: 1 jaula de Rocher, 1 camilla hidráulica, 3 m de espalderas, 1 barras paralelas, 2 espejos, 1 polea de pared, 2 bicicletas estáticas, 1 cinta de correr, 1 perchero para las colchonetas, 1 "armario" (espacio) para las pelotas suecas, 1 armario para lastres, cuerdas, poleas y pesas; 1 armario para materiales varios de propiocepción (pelotas, planos inestables, BOSU, picas...).

Por razones de espacio he tenido que suprimir la piscina y los dos vestuarios; es totalmente inviable construir una piscina dentro de esos 100 m2 si se tienen en cuenta los perímetros de 1,5 m para las sillas de ruedas, el ancho de los pasillos y demás normas técnicas. Por otro lado, he decidido que todas las puertas sean correderas para evitar problemas de espacio y facilitar los accesos.

En el caso de la recepción se ha reducido un poco el espacio, suprimiendo 2 sillas. Además, se ha adaptado el escritorio que hace las veces de mostrador para que tenga un tramo a menor altura accesible a personas en silla de ruedas.

El baño es la habitación que menos cambios ha necesitado, puesto que el tamaño de la habitación era el adecuado y algunas ideas eran correctas, como la barandilla (aunque son necesarias dos, por lo que se ha añadido una). El cambio (no visible) que tengo que hacer es el lavabo, que ahora no tiene obstáculos en su parte inferior, y la grifería, ahora de golpeo para facilitar su uso para los pacientes con dificultades para girar un grifo.

La sala de consulta permanece prácticamente igual, aunque la he ampliado para que quede respetado el perímetro de 1,5 m para el movimiento de la silla de ruedas. El armario del botiquín es más pequeño y se han suprimido el biombo y el armario del fisioterapeuta.

El tamaño del almacén se ha reducido, y se han suprimido el armario para los productos de limpieza de la piscina (por razones obvias) y las dos camillas portátiles a modo de repuesto.

La remodelación de la sala de tratamiento también ha sido importante: en primer lugar, el espacio de la piscina y los vestuarios se ha dedicado a esta sala. Se han suprimido uno de los espejos y las dos sillas. La polea de pared se ha enganchado a la jaula de Rocher para ahorrar espacio, y el armario para colchonetas se ha sustituido por un perchero para colchonetas (teniendo en cuenta que habrá pocos pacientes y no se necesita tanto espacio dedicado a este material). El armario de las pesas se ha suprimido para traspasarlas al armario correspondiente a los materiales de la jaula de Rocher.

Aun así, siguen existiendo fallos, aunque menos. Un fallo importante ha sido no incluir una ducha en el cuarto de baño, obligatoria si en la consulta hay máquinas que al utilizarlas el paciente puedan hacerle sudar (en consecuencia también hay que incluir un banco para cambiarse); además, las barandillas del váter tienen que ser más cortas. En la sala de consulta, el único fallo que existe es el perímetro alrededor de la camilla, que debe ser de 60 cm a cada lado de la misma, y en una de esas direcciones no se respeta el perímetro. Finalmente, en la sala de tratamiento coloqué una gran cantidad de espacio libre pensando que el perímetro de 1,50 m para la silla de ruedas debía respetarse a lo largo de toda la sala; dado que solo es necesario un punto de la sala en el que exista ese perímetro, puedo añadir más aparatos de mecanoterapia.

Para el tercer y último boceto de la clínica solo debemos tener en cuenta el Protocolo/guía de requisitos mínimos exigibles a centros/gabinetes de fisioterapia, concretamente las páginas 6 a 8. Este protocolo incluye datos como el perímetro que debe existir alrededor de cada camilla (comentado anteriormente), el espacio de 2 m2 que debe existir entre máquinas de alta frecuencia, la necesidad de incluir la magnetoterapia en un box aparte del resto de la sala de consulta o el desahogo de no tener que calcular el espacio que ocupan los armarios, puesto que se considera que no ocupan espacio vital; es decir, se puede colocar un único armario en el que quepan absolutamente todos los materiales de la sala de tratamiento. Lo mismo ocurre con el almacenamiento de los residuos con riesgo biológico (como las agujas de acupuntura, las gasas, etc.).

Finalmente, para las personas con poco cálculos de las proporciones (como es mi caso) se incluye en el documento el tamaño real de todos los materiales que puede haber en una clínica de Fisioterapia.

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